Se debería empezar muriendo y así ese trauma estaría superado.
Luego te despiertas en un geriátrico, mejorando día a día.
Después te echan del geriátrico, porque ya estás bien. Lo primero que haces es cobrar tu pensión.
Luego, en tu primer día de trabajo te dan un reloj de oro. Trabajas 40 años, hasta que eres bastante joven como para disfrutar del retiro de la vida laboral.
Entonces vas de fiesta en fiesta, bebes, practicas el sexo, no tienes problemas graves y te preparas para empezar a estudiar.
Luego empiezas el cole, jugando con tus amigos, sin ningún tipo de obligación, Y los últimos nueve meses, los pasas flotando tranquilo, con calefacción central, room-service, etc.
Hasta que finalmente...
¡Abandonas este puto mundo en un espectacular orgasmo !
______________
Nota del autor de Caballo de Letras: Algunos detalles del texto que podrían parecer defectos tipográficos como la Y colocada después de una coma en el antepenúltimo renglón y el espacio que existe entre el signo que indica el término de una exlamación y la última palabra del texto permanecen de este modo debido a que se decidió respetar la grafía de la fuente:
NOTAS PARA FACEBOOK
Consultado el 11/10/2009, 9:58 PM
12 comentarios:
He encontrado este sitio buscando un texto de Borges, ha sido una grata sorpresa. Hay mucho que leer, y a primera vista, todo es interesante y sugerente. Gracias.
Hola, Constances.
Me da gusto que te haya agradado lo que encontraste en el blog.
Vuelvue cuando gustes.
He encontrado el cuento. Pero no sé a cuál de los libros pertenece. ¿Me puedes ayudar?
Gracias, en cualqiuier caso.
La Leyenda
Abel y Caín se encontraron después de la muerte de Abel. Caminaban por el desierto y se reconocieron desde lejos, porque los dos eran muy altos. Los hermanos se sentaron en la tierra, hicieron un fuego y comieron. Guardaban silencio, a la manera de la gente cansada cuando declina el día. En el cielo asomaba alguna estrella, que aún no había recibido su nombre. A la luz de las llamas, Caín advirtió en la frente de Abel la marca de la piedra y dejó caer el pan que estaba por llevarse a la boca y pidió que le fuera perdonado su crimen.
Abel contestó:
-¿Tú me has matado o yo te he matado? Ya no recuerdo; aquí estamos juntos como antes.
-Ahora sé que en verdad me has perdonado -dijo Caín-, porque olvidar es perdonar. Yo trataré también de olvidar.
Abel dijo despacio:
-Así es. Mientras dura el remordimiento dura la culpa.
Esto lo he escuchado varias veces. No sé si todos se a inspirado en él, pero, definitivamente suena a buena idea.
Parecerá cliché pero, ¿viste "el misterioso caso de Benjami Button", o has leído el texto en el que se baso la película (de Fitzgerald, si mal no recuerdo)?
A mi me conmovió mucho. Pero me resulto fascinante precisamente esa idea: ser joven con experiencia.
Eso también me recuerda mucho un video que encontré en youtube hace un buen, sobre usar bloqueador solar (este de aquí), hasta la fecha me conmueve.
En fin, un gusto saludarte.
Fe de erratas:
no es "se a...", sino "se ha". Och!
No te preocupes, Rosigerante. Sabemos que eres una purista encarnizada del lenguaje y que tratándose de ti, eso claramente es un simple error de dedo...
Sí, vi la película de Benjamin Button. ¿De dónde vendrá entonces la idea "original" de "comenzar a vivir por el final"?
También extrañaba leerte. ¿Cómo has estado?
No me imagino quién habrá sido el primero en pensarlo, seguro ni lo publicó (ya sabes, "mucha gente, pocas ideas") Pero yo ya lo he escuchado muchas veces y suena a buena idea... ¡Oh, si tan sólo se pudiera!
Me va bien. Diferente, pero bien. Ya pronto publicaré muchas cosas. En especial, me he acordado de ti por un texto que ya está prácticamente listo y que estoy segura que te encantará discutir: es sobre el tiempo.
Sí, he estado leyendo a San Agustín (bueno, sólo una parte de "Confesiones") y debo decir que ha causado una fuerte impresión en mi.
También, últimamente, me he acordado de Elphaba, mucho. Hay un hombre que me la recuerda. Eso aún no tiene forma (en realidad, él tampoco), pero ya va caminando la idea.
Yo extraño nuestras discusiones, la retroalimentación y... oggh, echo de menos leer tu blog. ¿Tú cómo estás? Te mando un fuerte abrazo AlánElías.
¡Chócalas!
Oyeee, no soy purista... Pero, por cierto, jajajajaja, era "se han", jaja. Sale, biiiike.
¡Chócalas entonces!
¿Qué es lo que te ha dejado una fuerte impresión de San Agustín?
Mmmmnn, ya lo leerás (es que si no, ¡capaz que redacto aquí la entrada!)
OK.
Hola, Alejandro.
Gracias por aclararlo. Haré los cambios pertinentes en la entrada.
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