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Mostrando las entradas con la etiqueta Mensajes del autor. Mostrar todas las entradas
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jueves, 11 de junio de 2009

Lo leíste primero en Caballo de Letras



Estimado lector:

Caballo de Letras trae para ti esta nueva etiqueta dentro del blog.

Cuando veas que una entrada la ostenta quiere decir que a la fecha en que ésta fue publicada no existía aún ningúna otra página web en que el contenido de la misma hubiera aparecido, por lo que podemos decir que lo leíste primero en Caballo de Letras, por lo menos en Internet.

Esta etiqueta será aplicada a todas las entradas que lo ameriten aun si son anteriores a la fecha en que esta etiqueta se comenzó a utilizar.

Para efectos prácticos la etiqueta será colocada únicamente a entradas que contengan algún texto distinto a los producidos por el autor del blog.

Espero que sigas disfrutando este espacio.

-Alan

domingo, 21 de diciembre de 2008

Respecto al tamaño del contenido de las entradas

Para comodidad e interés de los lectores, Caballo de Letras procura que el contenido de las entradas en prosa aquí publicadas no rebase la extensión de dos hojas A4 escritas con letra Georgia tamaño 11. En caso de que los textos sean de mayores dimensiones se intentará redirigir a los lectores a las páginas Web en que éstos se encuentran para facilitar su lectura.

miércoles, 26 de noviembre de 2008

Creación de la Biblioteca de Caballo de Letras

Queridos lectores:

Caballo de Letras busca poner a su disposición libros electrónicos de manera gratuita con el fin de que puedan tener acceso a una cómoda lectura en ellos. Para ello se creará una entra especial dentro de este blog que fungirá como biblioteca al contener libros electrónicos mayormente catalogados dentro de los ámbito de la literatura, la filosofía y la religión, aunque cualquier clase de material podría ser incluído.

Se procurará que para mayor comodidad de los lectores todas las obras estén en formato PDF (que al parecer es el que más cómodo manejo y lectura ofrece a los usuarios en cuanto a documentos electrónicos se refiere) , y no en cualquier otro (como html o texto plano), pues esta biblioteca no tendría razón de ser al existir ya proyectos muy completos, como Project Gutenberg, que ofrecen gran parte de los clásicos universales en formatos distintos al PDF, y es evidente que los lectores obtendrían mayor provecho visitando directamente esos sitios web.

Esperamos que la Biblioteca de Caballo de Letras les sea de utilidad.

lunes, 14 de julio de 2008

¡No los lean! Al menos no en estas editoriales...

Así es, queridos lectores. Caballo de Letras tiene el honor de desprestigiar a dos muy queridas editoriales mexicanas. Bueno, no tanto el desprestigiarlas, sino simplemente…

¡ADVERTIRLES DE LOS RIESGOS Y CONSECUENCIAS DE COMPRAR ALGUNOS DE SUS LIBROS!

En esta ocasión, presentamos dos casos: uno respecto a una edición del Quijote por parte de Editores Mexicanos Unidos, S.A. y otra de los Diálogos de Platón, de Editorial Porrúa.

He aquí una fotografía de cara y el número de identificación del primer acusado:

ISBN 978-968-15-2209-4

Esta querida edición del Quijote peca en una cosa: No está completa, son los fragmentos principales de la obra. Con tan solo ver el tamaño de la letra y del libro es fácil suponerlo, pero el hacer esto no es obligación del lector, o mejor dicho, de quien lo compra. No hay nada de malo en que la edición de un libro esté incompleta o sólo sean extractos de una obra. Lo malo es cuando esto no se indica en ningún lugar de la edición. Esto hace suponer que se tiene en las manos la versión completa y nos llevamos una desilusión. O algo peor… si no nos damos cuenta leemos el libro creyendo que conocimos íntegramente la obra. En lo personal, cuando se relee un texto (en este caso, si lo hiciéramos cuando tuviéramos ya la obra completa) no tenemos el mismo placer ni experimentamos lo mismo que la primera vez. Libros así pueden estropear la calidad de nuestra lectura.

Vayamos al segundo acusado, esta edición de los Diálogos de Platón, de Porrúa:

ISBN: 970-07-3959-7

¿Cuál signo es el que se utiliza en español (o castellano, por si me lee algún catalán, ya hasta les tengo miedo…) para indicar un diálogo en una narración? El guión. ¿Qué es lo que le falla a Porrúa en esta edición? ¡Eso mismo! A esta edición, por lo menos en la República y Fedro, le faltan algunos guiones, y esto es desastroso. ¿Cómo seguir la trama argumental, que es una de las cosas más valiosas de estos diálogos, si faltan guiones? Por supuesto, el texto es entendible, pero es molesto tener que estar revisando quién dijo qué a media lectura. Bueno, con el tiempo el lector desarrolla algo de feeling y la ausencia de algunos guiones es de menor molestia: se acostumbra a considerar cualquier idea a primera vista contradictoria, insostenible o pensada como injusta en la actualidad como algo no dicho por Sócrates. ¿Otro modo de reconocimiento más práctico? Cuando vemos que quien habla lo hace en párrafos, es Sócrates; cuando aparece una frase a penas para manifestar acuerdo con lo dicho, asentir o negar, es el interlocutor de Sócrates en turno (esto último no aplica siempre para Trasímaco).

¿Debería ser necesario esto? Por supuesto que no.

Moraleja: Niños, lo barato sale caro… Si quieren leer algo no duden en comprar la mejor edición disponible. Hay que echar mano y agradecer la labor de editoriales como Gredos, Cátedra, Galaxia-Gutenberg, y para que no digan que soy malinchista, el Fondo de Cultura Económica. ¿Qué haríamos sin su calidad?

jueves, 8 de mayo de 2008

Caballo de Letras se vuelve bilingüe

Así es, queridos lectores. Caballo de Letras será conocido también como The Horse Writer, que será una traducción de este blog al idioma inglés con el fin de que el contenido sea accesible a un mayor número de lectores. La dirección electrónica de The Horse Writer es:

http://thehorsewriter.blogspot.com/

No fue fácil elegir este nombre, pues traducir Caballo de Letras como The Horse of Letters traería a la mente un caballo del antiguo servicio de correos antes que una asociación con la palabra letras tal y como se entiende en español.

Traduttore, traditore... el traductor es un traidor. Y sí, estoy convencido de que tampoco es fácil llevar a otro idioma este blog debido al tipo de contenido y a que incluso el original no se encuentra totalmente en español.

A propósito de esto, pido disculpas a algunos lectores, pues es muy molesto encontrarse a media lectura con un idioma que se desconoce cuando se supone que el contenido del texto debería estar en nuestra lengua. Esto sucede a menudo en literatura, pues no siempre se poseen traducciones a nuestro idioma. Por otro lado, cuando cito algún texto prefiero hacerlo directamente en el idioma en que lo leí.

Lo que se traducirá de modo seguro serán mis propios comentarios. No obstante, se aprovechará esta oportunidad para reclasificar el contenido de ambos blogs: si existe algún fragmento en un idioma ajeno al de cada blog y es posible tener acceso a una traducción en algún idioma de dichos blogs, se colocará la traducción correspondiente a cada uno. En caso de que no se tenga a la mano una traducción previamente publicada podrán ocurrir dos cosas: o se dejará el contenido en el idioma original, o lo que es menos problable y recomendable, sabiendo que la traducción misma es un arte (máxime en poesía), los colaboradores del blog (Adrienne Saur y yo)intentaremos traducir el fragmento.

Sólo se les pide paciencia, pues definitivamente es difícil que en el blog en inglés aparezcan los posts al mismo ritmo que lo hacen en el original.

Alan

domingo, 30 de marzo de 2008

Caballo de Letras comprometido con la calidad de presentación de sus entradas

Caballo de Letras busca ofrecer calidad a los lectores en la presentación de sus entradas y se esfuerza porque éstas aparezcan libres de errores y defectos. Los caballos suelen equivocarse poco en las cosas que saben hacer, menos que los humanos. Desgraciadamente quien escribe este blog no es un equino. Bueno, cuando comete errores es un burro...

Por este motivo, si en alguna de las entradas se detectan errores de ortografía, sintaxis, formato, hipervínculos defectuosos o de cualquier otro tipo les agradecería me los indicaran colocando un comentario en la entrada donde se encuentran para corregirlos y evitarles molestias. Gracias y espero que sigan disfrutando el blog.

Alan

jueves, 28 de febrero de 2008

Respecto a modificaciones y solicitudes en las entradas

Las entradas que ya hayan sido publicadas y que posteriormente se editen de modo sustancial o se les agregue alguna opinión del autor serán publicadas de nuevo con fecha actualizada, desapareciendo las versiones anteriores. Si dichas entradas tuvieran comentarios por parte de los lectores, permanecerán con su fecha original pese a las modificaciones y éstas se avisarán a los lectores mediante un comentario a la entrada modificada o como una nueva entrada en el blog. Se suplica a los lectores seleccionen la opción de dar seguimiento a los comentarios de las entradas en las que estén interesados para enterarse de los cambios.

Si algún lector necesita algo en relación a un texto publicado (como mayor información o alguna traducción, por ejemplo), pídalo y con gusto veré qué puedo hacer.
Alan

Pequeña apología de mi Caballo de Letras

Durante la corta existencia de este blog se han publicado diversas clases de entradas. La mayor parte del contenido de ellas no es de mi autoría, simplemente reflejan lo que explica el título del blog:

Letras, placeres, disgustos y reflexiones que pasan por mi mente (o por lo menos, esto era hasta la fecha en que coloqué esta entrada).

Frente a esto, la reacción de los lectores a través de comentarios a los posts y del chat ha sido diversa: he recibido buenas críticas, pero también invitaciones al suicidio.

A quienes forman parte del primer grupo me gustaría hacerles saber que sus palabras han sido un aliento para continuar. Es grato saber que existen lectores que encuentran placer en visitar Caballo de Letras y que aman su caprichoso contenido. A los otros, que no menosprecio sus opiniones y que éstas me sirven para pulir el material de este espacio (aun en los casos en los que éste sea una mera selección) y para darme cuenta de lo que la gente busca, que no necesariamente será lo que yo esté dispuesto a o en posibilidades de ofrecer. A ambos doy las gracias por haberse tomado su tiempo para visitar el blog e intercambiar opiniones conmigo, me encantaría seguir recibiendo sus visitas.

Ahora bien, existen lectores que me han hecho sugerencias y/o reproches respecto a algo que se observa en las entradas: algunas de ellas carecen de comentarios míos. Otros me preguntan acerca de mi motivación para incluir determinadas entradas. Permítanme explicarles.

Primero, acerca del criterio que sigo para publicar, lo resumiré en una frase: es totalmente subjetivo, arbitrario. Me remito de nuevo al texto explicativo debajo del título del blog. Casi todo lo que hay aquí es una amalgama de mis gustos. El mismo título de Caballo de Letras se debe a mi deseo de honrar a dos de mis mayores placeres: la literatura, sobre todo la poesía, y mi amor por los caballos. Es evidente que la palabra honrar no tiene relación alguna con exponer o hablar con profundidad y rigor de aquello que es objeto de honra. Por el contrario, la consideración especial que se tiene hacia lo que es honrado nos puede alejar de una visión objetiva de ello, y no ocultaré nunca esto en el blog.

Cuando hablo de una amalgama de mis gustos, el contenido y la fascinación que siento no se limita a la literatura y los caballos, sino que también el término incluye a la filosofía, las religiones, la teología y la apologética, aunque a la fecha este tipo de contenido en las entradas ha aparecido poco o aún no lo ha hecho, como en el caso de las dos últimas. La lista no es limitativa, la actitud y el punto de vista desde el que abordo los contenidos puede ser cualquiera.

Pasando a otro tema, algunos consideran como falta de originalidad el que me dedique a realizar comentarios de libros, autores y obras más que a publicar mis propios escritos. Creo que esto es cuestión de enfoque y de lo que cada persona espera encontrar en un blog: los hay de todos los colores y sabores, no existe ortodoxia alguna para su contenido . Hablo de cuestión de enfoque porque las recopilaciones y la selección de textos implican creatividad, por algo las antologías también poseen derechos de autor.

Ahora, en cuanto a la falta de mi opinión en algunas entradas, he decidido guardar silencio porque no tengo nada qué decir que sea útil para que el lector disfrute el texto. Por ejemplo, creo que los Fragmentos y Poemas que amo hablan por sí mismos, no requieren ningún comentario por parte mía en la entrada, pero claro que me encantaría intercambiar ideas con los lectores respecto a algún enfoque, contenido o idea de texto en particular a través de comentarios a las entradas. Prefiero que sean los lectores quienes inicien y dirijan el rumbo del tema. No obstante, tomaré en cuenta lo anterior y en los casos en los que me sienta (y de hecho, me he sentido) tentado a comentar alguna entrada, lo haré. Sólo espero que mi punto de vista no entorpezca, vicie o les arruine la lectura del texto; si esto ocurre, por favor, perdónenme e ignórenme, no dejen que les robe el placer de la exposición sin ideas preconcebidas ante una forma de arte.

En cuanto a los comentarios a los libros u otras obras que no pueden ser reproducidas totalmente en el espacio de un blog me he tomado mayores libertades: he procurado incitar a su lectura y exponer el contenido a través de mi propia percepción.

En un grado extremadamente inferior en importancia me dedicaré a exponer a los lectores muestras de mi propia obra.

Explicar, diseccionar o hacer análisis críticos del contenido de los textos no es el principal objetivo de este blog, más bien tiende hacia la contemplación y el disfrute de lo que se lee. Creo que en ello se ve involucrada también la creatividad.

Como siempre, nada de lo aquí dicho es definitivo.

Alan